Gabriel y Cristóbal...



Han pasado casi 20 días de la llegada de Cristóbal al mundo... 20 días que han estado llenos de todo tipo de emociones, sentimientos, situaciones..etc.

Me quedé solo dos días en la maternidad, porque Gabriel no quería comer y dormía mal, y con esa preocupación no podía estar tranquila; además que me sentía bien, nada me dolía demasiado y estar todo el día en cama me ponía los nervios de punta, además que la enfermera venía cada nada para ocuparse del bebé.. como si fuera una nanny!! En fin que pedi el alta antes de tiempo y regresamos a casa...

Gabriel recibió bien al hermano, pero su comportamiento cambió mucho, comenzaron los berrinches y los celos... al pobre enano le está costando aceptar que ya no es el único y que ahora habrá que compartir mamá, papá, abuelos... juguetes, etc, etc, etc...


Hoy en día las cosas van mejor, con la ayuda de mi mami y mi tía, las cosas van machando mejor... y podemos ocuparnos de los dos y de la casa :o)

Cristóbal crece tan rápido!!! Hoy cuando lo vestía y lo puse de vientre, vi cómo levantaba ya su cabecita, hay ropita que ya no le queda... y su carita también va cambiando...


Las noches no son tan difíciles, como le doy biberón -porque esta vez tampoco me "subió" la leche, por más que intentamos  "n" métodos, recetas, y tips...- los horarios para darle de comer son  más o menos fijos...


En éstos días voy acomodándome a mi nueva condición de mamá de dos principitos preciosos, con todo lo que eso conlleva, a veces se me rompe el corazón cuando veo y Gabriel llorar o intentar llamar la atención de su papá o sus abuelos a todo precio, aunque para eso tenga que gritar, llorar, caminar con los zapatos del papá, hacer tonterías. A veces siento también que no le dedico tiempo suficiente a Cristóbal porque muchas veces es la abuela quien lo tiene en brazos mientras yo me ocupo de su hermano, que ahora está en la edad de pedir atenciónm descubrir cosas, mostrarte los "logros" que va alcanzando...






Intento a darle a cada uno el tiempo de acuerdo a sus necesidades, a los dos los adoro con toda el alma... quisiera poder transmitirles eso a mis hijos... quisiera estar segura que tanto uno como el otro  tengan la certitud que los amo con la misma intensidad y que quisiera poder partirme en ocho para estar con cada uno en todo momento...

Soy feliz con mis dos preciosos, soy feliz con mis tres hombres de la casa...   con mi mamá a mi lado... tengo mucha suerte y mucho que agradecer a Dios...










Cristóbal llegó a su "nuevo mundo"


Eran pasadas las 04:00 horas, estaba intentando dormir, pero como las últimas noches se me hacía difícil encontrar una posición adecuada cuando de pronto sentí una fuerte contracción... pensé que iba a pasar, pero al cabo de unos 15 minutos vino otra... y luego otra...

JF me acariciaba la panza, tratando de "calmar" al bebé, pero no era el bebé quien se movía, eran las contracciones lo que me causaba el dolor. Decidió levantarse y prepararse para ir a trabajar, y me sugirió que revisara si tenía todo en la maleta de maternidad. Cuando me levanté, las contracciones eran más seguidas y más fuertes, así que decidí llamar a mi papá -él es médico- para preguntarle si  era posible que el bebé se adelantara tanto y si debía irme ya a la maternidad... Hablé con él, en Perú era la media noche y felizmente papá estaba despierto porque tenía guardia en el hospital, cuando le conte lo fuerte de las contracciones y la frecuencia, me dijo que me vaya inmediatamente y sin esperar a la clínica...  yo que ya estaba con contracciones cada 5 minutos le hice caso... puse lo que creí que me faltaba en la maleta... No tuve tiempo de darme una ducha, depilarme, nisiquiera peinarme, solamente tuve tiempo de ponerme un jogging, preocuparme de dar indicaciones a mi mamá para el cuidado de Gabriel, y salir volando en el auto...

Cuando ya estábamos por partir, JF regresó a la casa y sacó una manta y un almohadón, yo no entendí para qué ni tampoco me importó,  lo único que quería era llegar a la clínica y punto. Poco después supe el por qué, era un martes, salíamos de casa a las 07:30 a.m. e íbamos a tomar la autopista por la que pasan miles de frontaliers para ir a trabajar, era la hora punta de los embotellamientos... JF pensó en que quizás no llegaríamos a la clínica a tiempo... jejeje

Pero la suerte estuvo de nuestro lado, las vacaciones escolares de "Todos Santos" aún no habían terminado, y como los niños se quedan en casa, pues muchos padres también toman vacaciones. La autopista no estaba bloqueada.

Salimos a las 7:30 de casa, llegamos a la clínica en Luxemburgo a las 8:05 a.m. con contracciones cada 2 minutos. Cuando la enfermera me revisó, me dijo que estaba con dilatación completa, y yo en mi desesperación sólo atinaba a decirles que no quería dar a luz en echada en una cama, que quería dar a luz en el agua.  Llamaron a mi médico, llenaron la bañera y me metieron, me rompieron la bolsa, y me pedían que puje... mis contracciones eran muy cortas, yo estaba asustada porque todo pasaba muy rápido y no recordaba ni cómo pujar, mi médico llegó a los pocos minutos y me hicieron aspirar oxitocina para que las contracciones duren más, yo pujaba y la obtetriz me ponia los dedos para ayudar al bebé a salir pero el efecto era todo lo contrario, me hacia doler tanto que no podía... ya había pasado media hora y el bebé no podía salir. Me pidieron que saliera de la bañera, que intentaríamos otras posiciones, de cuclillas o lo que fuera pero que el bebé tenía que salir pronto...

Me puse de cuclillas en el agua, mientras me preparaba para pararme, y salir de la bañera, las enfermeras, la obstetriy e el médico estaban por salir,  intenté pararme, cuando de pronto sentí un dolor muy fuerte, sentí ganas de pujar, me di la vuelta para echarme de nuevo en la bañera, di un grito de dolor, y senti salir la cabeza del bebé... luego su cuerpo... todo ocurrió tan rápido!!!

A las 8:52 había nacido Cristóbal... con 3.140 Kg. de peso y 52 cm... casi no lloró.. abrió sus ojitos y miró el mundo...

Ahora tengo dos pequeños tesoros...